La recientemente feria taurina de Fallas, nos deja varios puntos que comentar, y que deben ser punto de reflexión de empresa, toreros y ganaderos; para intentar mejorar la feria y la imagen de la fiesta ofrecida en ella.
La empresa, en este caso Simón Casas, debe de estar satisfecho por la afluencia de público, que no ha fallado una vez más a las Fallas, pero que vio como se le encarecían los precios de las entradas y en el ruedo no se ha reflejado dicho aumento. Clientela tiene pero, los precios, deberían de quedar como estaban antes y primar que la juventud acuda al coso de Monleón.
La principal mejora de la empresa tiene que estar en la reseña de corridas de toros para Valencia. Este año la presentación de los toros ha sido lamentable, sobre todo, cuando las figuras pisaban la calle de Játiva. Con las excepciones de Fuente-Ymbro y Adolfo Martín, los demás encierros han sido carentes de trapío para lo que exige una plaza de primera. Tampoco se explica que en los reconocimientos, la presidencia y veterinarios, dejaran pasar encierros tan lamentables como el de Núñez del Cuvillo o “Las Ramblas”. Lo que da la sospecha, que estos señores, en vez de velar por la garantía del espectáculo y defender al espectador, están para que Simón y compañía no tengan problemas.
Otra cosa es la colocación en los carteles de toreros que no han realizado nada para estar en la feria y que únicamente tienen padrino. Son los llamados “Cromos”, bautizados por este blog.
A la vista está el resultado de estos toreros, dejándose sin torear y aprovechar toros de triunfo, y dejando en casa a toreros triunfadores de Fallas, como César Jiménez o José Calvo y a otros que se lo habían ganado a sangre y fuego durante la temporada, caso de Arturo Macías o Diego Urdiales.
Lo único que ha funcionado ha sido Alberto Aguilar, que venía como cromo, pero por su actitud y firmeza ante la corrida de Adolfo, lo han convertido en imprescindible.
Valencia es plaza de primera y las llamadas figuras deberían de ser conscientes de venir con corridas de toros de presentación de primera. Ir a Valencia con encierros tan impresentables como los que han ido, daña la imagen de la fiesta y de ellos mismos. Vale que el triunfador fuera Manzanares, que Perera estuviera valentísimo, pero eso hubiera lucido más ante animales de mayor talla. Luego vino, Aguilar, a torear los enormes Adolfos y se vio de otra manera.
Vale que Cuvillo o Victoriano del Río sean las ganaderías de marca, pero no vale que estén presentadas tan horriblemente mal. Esas ganaderías presentadas así, son de moda, pero de la del mercadillo. Esos chotitoros hacen mucho daño a la fiesta. Luego se inauguran plazas, como la de Priego de Córdoba, mandan seis desechos morunos y allí no se entera ni el papa de la falsificación de la marca a precio de una real. El ganadero de moda tiene que tener una colección de garantías y que se rompa según su uso. En este caso Fuente-Ymbro lo clavó, aunque sus toros no fueran bien usados.
A estas horas, los G10, están reunidos en Sevilla hablando de no sé muy bien qué. Espero que salga a relucir la presencia del toro sin falsificar, por el bien de todos.
Por Fran Pérez