Lección francesa. Ante la Unesco, adelantándose a la misma España, sin complejos Morales, mientras en Catalunya fabrican su 'cultura' desde la burda, y 'democrática', prohibición.
Más que alegría, por esta lección, siento vergüenza. Vergonya de viure on visc, de parlar com parle.
PS: desde Asturias, esto se tenía que postear.